El Campamento de Verano reunió a 7 niñas y niños de la Casa Comunitaria en un espacio seguro, afectivo y creativo, diseñado para fortalecer su bienestar emocional, su autoestima y su capacidad de convivir en comunidad. A lo largo de tres sesiones, las y los participantes exploraron sus emociones, ejercitaron su imaginación y desarrollaron habilidades sociales fundamentales.

Las actividades —planeadas pedagógicamente— promovieron la expresión libre, el juego colaborativo y la confianza en sí mismos. Se trabajó a través de dinámicas artísticas, ejercicios corporales, cuentos, juegos y espacios de reflexión adaptados a su edad.

El grupo mostró apertura, alegría y participación activa. Se observaron avances en la regulación emocional, el respeto de turnos, la escucha activa y la construcción de vínculos positivos entre pares. Las niñas y los niños expresaron sentirse acompañados, valorados y con mayor seguridad para nombrar cómo se sienten.

El campamento reafirmó la importancia de ofrecer experiencias lúdicas y afectivas que fortalezcan a la infancia en contextos de vulnerabilidad. La intervención contribuyó directamente al bienestar emocional de las y los participantes y consolidó un ambiente comunitario más empático y protector.